bitácora de una campusera: Día 1, II parte.

Luego de llegar a Panamá, mi celular tenía señal y bueno era feliz twitteando, a pesar de que mi mente tenía MIL COSAS a la vez. Mami en el blackberry messenger, las compras de Panamá, que el vuelo no me dejara y las maletas que me tenían loca. Ví muchas cosas pero todas más caras de lo que pensaba :( como por ejemplo mi hermoso iPad añorado y el iPhone 4. Creo que esperaré papa noel del 2012 jajaja. Luego, embarqué lista para estar 7 horas completas en un avión.
Soporte muy bien, pero solo pude dormir 30 minutos. Aunque hago enfásis en que ya creo que no le tengo miedo a los aviones, pues, se me hizo ligero el viaje, hasta el final:

Al ver por la ventana mi miedo se hizo realidad, llovía DEMASIADO. Parecía una manguera al lado de mi ventana del avión. El avión se balanceaba por el viento hasta que gracias a una nube, el piloto no vio el suelo y lanzó literalmente el avión contra la pista mojada y la lluvia. siento que reboté pero bueno, era porque el piloto quería jugar a hacer splash, lo entendí.
Eran las 5 de la mañana en sao Paulo, pero las 2 de la mañana en Venezuela. Aun no me acostumbro mucho al cambio...

Al llegar al campus fue mágico pero trágico. Mi carpa, ya estaba ocupada, pero luego me asignaron una que quedó perfectamente situada al frente de los seguridad. Lo unico que deseaba en ese momento era un baño, no saben cuanto. Me regalaron una bata de baño y una toalla y ahí fue donde me dí cuenta que SE ME HABIA OLVIDADO EL JABON! gracias a ser una patriota y poner una bandera de Vzla (con 7 estrellas) encima de mi carpa, una colombiana me salvó la patria con un jabón extra para su colega de país! jajaja...
El agua era caiente pero la necesitaba fría. LA MEJOR DUCHA DE LA SEMANA!
Luego de ganar mil cosas en los juegos, de ver a Al Gore, Tim Lerners Lee, un señor de la NASA y dormirme en la carpa con y sin lluvia, estoy aquí, escribiendo esto mientras mis neuronas ya no saben que redactar, mientras mi laptop consume su pila y mientras me siento como una de las gordas de la película Wall-e, toda vaga frente a un TV en un puff con wifi. Esto es vida, si por mi fuese, estuviese aquí un año.

Por ahora, iré a llamar a mi mamá para luego irme a dormir, buenas noches...

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